El consumismo navideño

(Por Rolando Geraldo).- El gasto familiar en gran parte de las familias chilenas se dispara al llegar la navidad. Se ha conseguido instaurar en las cabezas de los consumidores un principio muy claro: celebrar la navidad requiere ineludiblemente ir de compras. Desde un punto de vista más crítico, este principio debe ser sustituido por otros más responsables social y ambientalmente.


Durante el resto del año son varias las quejas que salen a la luz pública en los medios de comunicación en las que los propios consumidores hacen reclamos de algunos precios de productos ya sea; el gasto escolar al comienzo del mes de marzo, por la subida de los precios de la gasolina, etc. Sin embargo con la navidad se produce el efecto contrario, todo el mundo tiene asumido que celebrar la navidad significa gastar sin medir las consecuencias, así que se decide salir de compras justo en el momento del año en el que son más caros la mayoría de los productos, no es anecdótico por decirlo menos.

Bombardeo de publicidad

Sin duda hay algo detrás que impulsa a comprar a pesar de que las economías familiares se resientan. La publicidad de las tiendas comerciales aprovecha estos momentos en los que afloran nuestros mejores deseos y sentimientos para reconducirlos hacia el consumo, y ese continuo mensaje cala en nuestra sociedad sin que echemos la vista atrás para ver que, no hace tanto tiempo, éramos felices celebrando la navidad de otro modo. Este continuo bombardeo publicitario empieza más de un mes antes de que llegue la navidad, y lo hace comenzando por meter en las cabecitas de los más pequeños de la casa un montón de anuncios de juguetes, consolas, bicicletas, etc.

La publicidad esta dejando atrás las alternativas de consumo más justas social y ambientalmente, como pueden ser buscar juguetes de artesanía local, sin embalajes innecesarios, no sexistas ni bélicos, que estimulen la creatividad, adecuados a cada tipo de edad, con materiales naturales y biodegradables, juguetes en los que se esté pagando el producto, y no su publicidad. Además, estamos olvidando incluso lo más importante; que es posible jugar sin juguetes.

Recuperar la sensibilidad navideña

El recuperar la creatividad a la hora de celebrar estas fiestas es primordial para ser un país más entendido en la verdadera significación de la navidad, se necesita de una creatividad que nos ayude, en definitiva, a no pasar la navidad persiguiendo los inalcanzables sueños que proponen los anuncios, sino que nos muestre un camino más certero de conseguir nuestros deseos, y que tenga como punto de partida una forma de celebración más justa social y ambientalmente.